Yo pensé que podía quedarme sin ti y no puedo
Es difícil mi amor, más difícil de lo que pensé
Yo pensé que podía quedarme sin ti y no puedo
Es difícil mi amor, más difícil de lo que pensé
Que no se te olvide que un día llegaste a tu trabajo, miraste el manquehue nevado, pensaste en qué bueno sería ir el sábado.
Y no pudiste porque los cerros y montañas ya estaban habitados por alguien que no eras tú.
Con el tiempo,
le herida se te irá del pensamiento
Y aunque el dolor es lento, se seca con el sol
Lo lame el viento, renace la alegría en el lamento
Y olvidaré, cuánto lloré
Hoy llorándote
Mañana recordando que
Cuando el alma del amor se aleja
Entero el corazón se desmadeja
Hoy llorándote
Diciendo y recordando que
Si la vida se deshoja entera
Nos vuelve a florecer la primavera.
La miro, intento escucharla, intento seguir el hilo de su conversación. Dice algo y me voy, empiezo a pensar en mí, me conecto con mi dolor, se me llenan los ojos de lagrimas. Intento volver, la escucho nuevamente ahí donde me sigue hablando, la miro y me dan ganas de pedirle perdón por no poder, por no tener mente para escucharla sin que me duela todo el cuerpo.
Caminarás por las mismas calles
Caminaré por las mismas calles
Pero tú no estarás
Pero yo no estaré
Otras personas nos acompañarán
Y no seremos nosotros
Y no seremos nosotros
La niña terca apretará los dientes,
restringirá el alma, y acallará el habla,
será estrecha hasta ser apenas.
El plato hondo humeará en frente
y un remolino oscuro la atrapará
dejándola sin fiesta, abrazo ni sentido.
condenada al sabor que quiere y aborrece
solo palabras fisuradas saldrán de su boca
el cuerpo será borrado en el espejo robado
por la gruesa figura que la maltrata.
Leprosa de afectos se arrastrará entre los vivos
Con pantuflas de fantasma
Una y otra vez le solicitarán acatar
una cucharada por la madre, otra por el padre.
Ella tragará por el rigor,
el susto, el ruego o la condena
y enojada devolverá lo que no quiere y seguirá con hambre.
aislada en la isla secretamente protegida
la desaparecida llenará el estómago de nieve,
los ojos de suspenso, las manos de vacío
e intentara, intentará, intentará,
clausurar, sellar, encerrar
el incendio y el hastío.
Presa de su propio escape gritará auxilio tarde:
sorda la madre, ciego el padre, celosos los hermanos
negarán este sueños de princesa.
Ha sido expulsada de su especie.
Ya no es más una mujer.
P. Cordella
Hoy vas a mirar pa' lante
Tengo que dejarte
Tengo que irme de ti, tienes que irte de aquí. Tengo que darte el espacio que mereces, que no te di todas las veces que me quejé cuando algo no estaba en su lugar. Tengo que darme el espacio que merezco, el espacio que perdí cuando decidí apoyarte en tus proyectos.
Tengo que dejarte
Tengo que dejar de recordar todas las veces que me hiciste reir, que se me llenaron los ojos de lágrimas por lo mucho que me hacías feliz. Tengo que dejar de buscarte entre la gente, en el sonido de la ciudad, en la suavidad de tus dedos tocándome la espalda, en la melodía de tus labios rozándome la piel.
No digas que todo era una farsa.
Siento tanto haber perdido el mapa
que lleva al tesoro dulce y luminoso,
he olvidado donde lo escondimos.
No digas que todo era mentira:
los encuentros y las despedidas,
tampoco los días en que me decías
que todo iba a ir bien.
Aún queda tanto por vivir,
tantas cosas por hacer
aunque pesen los fracasos.
Cuántos veranos perdí
buscando aquella canción.
Siempre estuvo en tu regazo.
Nuestro error nunca fue amar
como si el jodido mundo
acabara en nuestro abrazo.
Que nadie te haga pensar
que no fuimos los mejores
cuando el sol ardía en tus labios.
Vuelvo y te encuentro en las cumbres y en el lodo,
la verdad es que te encuentro en casi todo,
siempre o casi siempre te encuentro.
Quizá por eso vuelvo.
Te vas de mí
Veo extinguirse el fuego
Que antes quemaba en ti
Que me llevaba al cielo
Te vas de mí
Te vas de mí
Después del vaso lleno
Vacío mi jardín
He de empezar de nuevo
Sembrar aquí semillas de amor
Y vino un largo invierno a quedarse aquí
Vino un largo sueño de mi corazón
Vino un tiempo largo de aprender a estar sin ti
Todo un invierno sin ti
Pensaba que contigo iba a envejecer
En otra vida, en otro mundo podrá ser
En esta solo queda irme un día
Y solamente verte en el atardecer
Si me ven solo y triste no me hablen
Si me ven solo y triste soy culpable
La vida es una fiesta que un día termina
Y fuiste tú mi baile inolvidable